Solo una de las 28 líneas del Plan del Transporte de la Diputación de Valladolid en la provincia suma más de cinco viajeros por trayecto, mientras que en el resto de los casos las medias se sitúan incluso por debajo de una o dos personas. Estas cifras reflejan que el denominado transporte a la demanda no está funcionando todo lo bien que debería en la provincia, ya que en algunas ocasiones los microautobuses han tenido que realizar los viajes solo con el conductor, sin que ningún pasajero realizará el trayecto. Es más, existe una línea (que ya se acordó su suspensión) entre las localidades de Pollos y Tordesillas donde no se ha montado nunca nadie. 

Los datos que maneja el equipo de Gobierno indican que solo la línea que cubre el trayecto entre Villafranca de Duero y Medina del Campo está funcionando razonablemente bien. Desde el comienzo de la tercera Fase del Plan del Transporte en abril de 2014 hasta el 31 de diciembre de 2015 la han utilizado 1.958 personas, lo que supone que ha contado con una media de 11,5 viajeros en cada uno de los trayectos. Es la única línea, la 14, que supera los cinco usuarios por cada uno de los viajes.
El resto tiene un comportamiento mejorable. El Plan estructura la provincia en cuatro zonas. Tierra de Campos, la comarca de Medina, Peñafiel y los enlaces entre la capital y los pueblos más cercanos a la ciudad, una de las zonas, esta última, que peores resultados está obteniendo.

En Tierra de Campos el epicentro es Medina de Rioseco. En esta parte de la provincia son doce líneas y solo una sobrepasa los cuatro viajeros de media. Lo normal es que se sitúen entre uno y dos viajeros por cada uno de los trayectos. En el caso de la ruta 1, entre Villafrechós y Medina de Rioseco lo usaron 1.248 personas (siempre en el periodo entre abril de 2014 y diciembre de 2015), lo que deja una media de 4,69 viajeros.

Casi sin uso. Es la mejor de las líneas, ya que otras están casi sin uso a pesar de que el trayecto se realiza todas las semanas. Sin ir más lejos, en el caso de las rutas 4, 5 y 6 entre Mayorga, Villafrechos y Montealegre con Rioseco, la Diputación ya ni las refleja debido a que tenían unas medias de 0,05, 0,74 y 0,02 por trayecto. Eso, igualmente, quiere decir que en repetidas ocasiones el trayecto lo realizaba únicamente el conductor.

En la zona de Peñafiel, la situación no es del todo mala. Las cinco líneas que unen Valbuena de Duero, Piñel de Arriba, Cogeces del Monte y San Llorente con Peñafiel tienen medias superan los dos viajeros por trayecto. La que mejor funciona es la de San Llorente, donde sube una media de 4,84 usuarios por cada uno de los  viajes. Entre Amusquillo y Peñafiel solo se han movido 16 usuarios.

En Medina del Campo, las seis rutas que recorren la comarca han llevado en este año y medio a 8.409 personas, siendo una de las zonas que más vecinos ha transportado. La línea que más viajeros lleva es la 21, que sale y llega de Medina y recorre las localidades de Nueva Villa de las Torres, Villaverde de Medina y Nava del Rey. Lo hace los lunes y los viernes, a excepción de los festivos. En cada uno de los viajes ha transportado a una media de 4,91 pasajeros, la segunda más elevada de toda la provincia.

No obstante, en esta comarca también hay alguna línea que no está funcionado bien. Puede ser el caso de la que va a Ataquines, con una media de 0,74 usuarios en cada uno de los viajes o la de Foncastín, con 0,99 de media y un total de 168 viajeros en año y medio.

La zona de la capital y Tordesillas puede ser la más sangrante teniendo en cuenta el coste que supone para la Diputación. En este caso existen líneas con grandes carencias, como es el caso de la 26, que une Simancas con Arroyo de la Encomienda. Solo un viajero ha subido a esta línea desde su implantación en octubre de 2014. La media es la más baja con excepción de la existente entre Pollos-Tordesillas. Ni más ni menos que 0,01. Los trayectos se realizan los martes y los jueves entre las 8.35 horas y las 12.54 y el coste por trayecto para el viajero es de 1 euro. Igualmente, la ruta entre Viana y Laguna tiene una media de 0,84 personas y ha transportado a 502 viajeros. Por último, la ruta entre Valladolid capital y Villafuerte de Esgueva deja una media de 0,05 y entre la ciudad y Tordesillas, 0,33.

La Diputación ha destinado a la tercera fase de este plan 294.641,81 euros para pagar a las empresas concesionarias de transportes que prestan el servicio, mientras que también sufragará con 209.945,45 euros el coste entre enero de este año y el 31 de marzo, cuando finaliza la prorroga  de este periodo. El coste total del Plan de Transporte desde su puesta en marcha para la institución provincial ha sido de 695.164,78 euros, a lo que hay que sumar el dinero sufragado por la Junta de Castilla y León.

Tanto el equipo de Gobierno como los grupos de la oposición entienden que las líneas de transporte a la demanda en la provincia tienen que sufrir una reestructuración, aunque entienden que se presta un servicio básico para los municipios que debe tener continuidad en el tiempo.